Las ampliaciones de Cerler y Formigal-Panticosa marcan el inicio de la temporada de Aramón
Tres nuevos telesillas, dos nuevas zonas esquiables y un dominio, líder en España, que se acerca cada vez más a los 300 kilómetros de pistas por los que deslizarse.
Este año Aramón llega más lejos con novedades e inversiones que superan los 20 millones para mejorar la experiencia del esquiador en una temporada de grandes expectativas.
Entre los actos a destacar se encuentra la conmemoración del 50 aniversario de Cerler, centro que estrena la ampliación hacia Castanesa. Además, el Valle de Izas, en Formigal-Panticosa, contará con dos nuevas sillas: Lanuza, que moderniza el valle y Pico Royo, que permite abrir la nueva zona esquiable de Lapazuso.
Aramón ha presentado hoy en Madrid sus novedades en una recta final de noviembre que no podía ser mejor: las nevadas que han llegado desde el inicio de esta semana (con más de 40 centímetros en las últimas 48 horas), el frío que está permitiendo producir más, y previsiones de cara al fin de semana que anuncian más nieve. Si los pronósticos se cumplen, todas las estaciones de Aramón abrirán el próximo 3 de diciembre, justo antes del puente de la Constitución, la primera gran cita de la nieve.
El grupo Aramón, el mayor dominio esquiable de España con 294 km., y líder en el mercado nacional con una cota de mercado del 25%, ha apostado fuerte por esta temporada de esquí que está al caer. Son más de 20 millones de euros en inversiones. Destacan los tres telesillas nuevos: Castanesa en Cerler, y Lanuza y Pico Royo en Formigal-Panticosa. Pero no son las únicas novedades del holding de la nieve que sigue invirtiendo en tecnología, en sostenibilidad y en mejorar la experiencia del cliente con innovaciones como el Cashless (forfait monedero), la entrega del alquiler de material en el hotel o las mejoras en innivación en Cerler y las estaciones turolenses.
Medio siglo de historia
En este 2021, en el que Cerler cumple 50 años, se inaugura también su ampliación, la de Castanesa. Un proyecto que a medio plazo supondrá una nueva entrada al centro de esquí, un acceso desde la N-230, desde Montanuy, una zona deprimida poblacionalmente y que ve en esta inversión un plan de futuro compatible con la ganadería que les permita asentar población. El nuevo telesilla, bautizado como Castanesa, ha permitido abrir cuatro nuevas pistas de esquí en un nuevo valle que permitirá viajar a los esquiadores más allá y disfrutar de nuevos y atractivos parajes.
También Formigal-Panticosa se abren nuevas pistas desde el collado de Lapazuso gracias al telesilla Pico Royo instalado este verano. Se trata de una nueva zona para esquiadores expertos (pista roja y pista negra). Este es uno de los dos remontes que se estrenarán ya que también se instaló, el verano pasado, el de Lanuza, un D-Line de Doppelmayr que circula a 6m/s, el primero de estas características que se había instalado en España. Con ellos dos, se ha abierto una nueva zona esquiable y se ha modernizado el valle de Izas, uno de los que más gustan a los esquiadores.
Las inversiones, que superan los 20 millones de euros, era un compromiso del grupo Aramón que ha sido financiado por un crédito sindicado obtenido gracias a la sostenibilidad del holding que, en los últimos años operativos, ha demostrado obtener la confianza del cliente y conseguir beneficios en los ejercicios.
Sostenibilidad económica, social con nuevos proyectos que darán vida y proporcionarán un atractivo en una zona deprimida y también medioambiental. Las montañas del grupo Aramón son las montañas en las que vive el 80% de su plantilla. Es su casa y su forma de vida, la montaña, de ahí su compromiso y el de la empresa con la reducción de la huella de carbono. Aramón fue el primero en implantar la recogida selectiva de residuos y en apostar por la eliminación del plástico; pero también invierte en innovación para la producción de nieve para una mayor eficiencia con menor consumo energético, inversión principal en las estaciones turolenses o el cuidado del entorno en el que vive y trabaja.
El cuidado de los 5000 árboles plantados en Formigal hace tres años (algunos ya de un metro de altura) o el apoyo a los ganaderos que pastan estas montañas como parte del ciclo natural son un ejemplo. En los últimos diez años, el grupo ha utilizado 10,5 toneladas de semilla autóctona que se obtiene a través de un proceso que ha llamado la atención de otras estaciones europeas en su proceso de hidrosiembra para regenerar el manto vegetal, colaborado en la colocación de abrevaderos, casetas para los pastores, mantenimiento de caminos o instalación de más de 30 kilómetros de vallado para facilitar su labor.
El grupo Aramón, además de ser fiel a las costumbres y usos del territorio en el que trabaja, también apuesta por la innovación para, cada vez más, mejorar la experiencia del cliente en sus montañas y pueblos. Esta temporada se estrena el Aramón Cashless (forfait-monedero), fomentando el sistema de pago con descuentos y ligado tanto al Club Aramón como la APP, una aplicación con nuevas funcionalidades y mejora de usabilidad. También la web se ha rediseñado dando mayor protagonismo al esquiador y desde Viajes Aramón, la agencia oficial del grupo de la nieve, se ha apostado por servicios como la entrega del alquiler en hoteles (además del forfait) para una mayor comodidad y mayor disfrute del esquí.
La nieve, protagonista de las experiencias de Aramón
Aramón, además, pensando en sus clientes, articula diversas experiencias con la nieve como protagonista para que sus esquiadores viajen en familia, con amigos o en pareja disfruten de estas montañas de sol a sol. Son experiencias únicas que hacen de estos destinos, un territorio especial para las vacaciones invernales. Las Mugas, para dormir bajo las estrellas a más de 1800 metros de altitud; el Skyline de Cerler, para disfrutar de los atardeceres rodeados de picos de más de 3000 metros; las zonas de trineos de Javalambre y Valdelinares, ideales para un primer contacto con la nieve en familia; el Tobogganing, una de las más veteranas experiencias para deslizarse en trineo por una pista iluminada tras una cena en uno de los restaurantes más singulares de Formigal; o el Snowcooking, para degustar una ‘cena de altura’ en Cerler antes de descender las pistas en plena noche, son algunas de ellas. Y por supuesto, su après-ski, para despedir la jornada brindando al son de la mejor música.